martes, 25 de agosto de 2015

“Filtran el mosquito y tragan el camello” (Mt 23,23-26.)

Evangelio según San Mateo 23,23-26.     
Comentario por David Quiroa

“Filtran el mosquito y tragan el camello” 

Esto es algo muy común en materia de moral.  Conozco mucha gente que se fija en el largo del pelo, el color de los zapatos y el largo de la falda, pero se les olvida pagar sueldos, dar cuentas exactas y abrazar a sus hijos.

No se trata de dejar que los niños se hagan piercings y tatuajes hasta donde no deben, ni que los empleados hagan lo que les dé la gana, sino acompañar esto con buenos consejos, muchas risas y abundantes abrazos y recomendaciones.

Es imposible que los padres estemos de acuerdo con la música que escuchan los hijos. Pero con un poquito de esfuerzo, podemos estar de acuerdo con los temas importantes de moral, honradez y responsabilidad. Con suerte, hasta quizás logremos un corte de pelo decente, nunca se sabe.

El ejemplo de hoy, San Luis IX, rey: A pesar de ser gobernante, era honrado, justo y caritativo. Tan justo era que los bandos contrarios se sometían voluntariamente a su arbitraje, evitando así muchas guerras y confrontaciones.

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Evangelio según San Mateo 23,23-26.

¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que pagan el diezmo de la menta, del hinojo y del comino, y descuidan lo esencial de la Ley: la justicia, la misericordia y la fidelidad! Hay que practicar esto, sin descuidar aquello.

¡Guías ciegos, que filtran el mosquito y se tragan el camello!

¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que limpian por fuera la copa y el plato, mientras que por dentro están llenos de codicia y desenfreno!


¡Fariseo ciego! Limpia primero la copa por dentro, y así también quedará limpia por fuera.

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