jueves, 14 de febrero de 2013


Evangelio según San Lucas 9,22-25
Comentario por: David Quiroa

“El Hijo debe sufrir mucho” 

Este tiempo de preparación para la Semana Mayor tiene el sentido que nos compenetremos con la misión del Señor: Sufrir, morir y resucitar.

Aunque nosotros no sufrimos tanto, el itinerario de nuestra vida es exactamente igual: pasar penas, ser rechazado por el mundo, morir y, gracias a Cristo, resucitar con Él.

Más que dedicarnos a buscar castigos para esta época, aprendamos a soportar con alegría los problemas cotidianos; no para aparentar sufrimiento como los hipócritas, sino para ser felices como los Hijos de Dios.

El ejemplo de hoy: San Valentín. Quizás el santo que casaba soldados haya sido producto de una leyenda, pero sí hubo un sacerdote Valentín, que sufrió martirio no por emparejar novios, sino por defender la Fe.
---------------     

Evangelio según San Lucas 9,22-25

“El Hijo del hombre, les dijo, debe sufrir mucho, ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, ser condenado a muerte y resucitar al tercer día”.

Después dijo a todos: “El que quiera venir detrás de mí, que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz cada día y me siga.

Porque el que quiera salvar su vida, la perderá  y el que pierda su vida por mí, la salvará.  ¿De qué le servirá al hombre ganar el mundo entero, si pierde y arruina su vida?

No hay comentarios:

Publicar un comentario