David Quiroa

Evangelio según San Marcos 4,21-25

Comentario por: David Quiroa

“La medida con que midan se usará para ustedes”

¿Qué nos parece esta forma de justicia? Así como nosotros juzgamos a otros, Dios nos juzga a nosotros.  La misma compasión que mostramos a los que nos ofenden, tiene Dios con nosotros cuando le ofendemos. Y un poco más.

Es por eso que uno tiene que ser exigente consigo mismo y misericordioso con los demás. No se puede exigir obediencia y respeto si uno no es obediente y respetuoso por dentro. Del mismo modo, si uno  quiere buen servicio, cortesía, amabilidad y respeto por las leyes, tiene que hacerlo primero.

En este mundo sobran quienes exigen. Siempre serán escasos los que den.

El ejemplo de hoy: San Juan Bosco. Hizo tantas obras que parecerían hechas por diez hombres, pero siempre dijo que no eran suyas, sino de  la Virgen.

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Evangelio según San Marcos 4,21-25

Jesús les decía: “¿Acaso se trae una lámpara para ponerla debajo de un cajón o debajo de la cama?  ¿No es más bien para colocarla sobre el candelero?

Porque no hay nada oculto que no deba ser revelado y nada secreto que no deba manifestarse.

¡Si alguien tiene oídos para oír, que oiga!”

Y les decía: “¡Presten atención a lo que oyen! La medida con que midan se usará con ustedes, y les darán más todavía. Porque al que tiene, se le dará, pero al que no tiene, se le quitará aún lo que no tiene”.