David Quiroa

Evangelio según San Lucas 17,1-6. 
Comentario por: David Quiroa

“Siete veces al día… perdónale”

                                                                                               

Habemos quienes guardamos rencores por ofensas que ya tienen canas.  Y Dios dice que si nuestro hermano nos ofende siete  veces al día y se arrepiente, lo perdonemos.

Siete veces diarias son muchas veces.  Ni el hijo peor portado ofende a sus papás siete veces diarias, mucho menos nuestros amigos que de vez en cuando nos dicen algo feo.

Hay que darle lugar en nuestra vida al  arrepentimiento y el perdón, como algo de todos los días. No hay que esperar a que nuestro  amigo o nuestro padre esté en su lecho de muerte para perdonarlo, porque habremos perdido una gran parte de nuestra vida en algo que no vale la pena.

El ejemplo de hoy: San Josafat. Luchó y murió por la unidad de los cristianos. Es el primer santo de origen oriental canonizado por la Iglesia occidental.

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Evangelio según San Lucas 17,1-6. 

Después dijo a sus discípulos: “Es inevitable que haya escándalos, pero ¡ay de aquel que los ocasiona! Más le valdría que le ataran al cuello una piedra de moler y lo precipitaran al mar, antes que escandalizar a uno de estos pequeños.

Por lo tanto, ¡tengan cuidado! Si tu hermano peca, repréndelo, y si se arrepiente, perdónalo. Y si peca siete veces al día contra ti, y otras tantas vuelve a ti, diciendo: ‘Me arrepiento’, perdónalo”.

Los Apóstoles dijeron al Señor: “Auméntanos la fe”.

El respondió: “Si ustedes tuvieran fe del tamaño de un grano de mostaza, y dijeran a esa morera que está ahí: ‘Arráncate de raíz y plántate en el mar’, ella les obedecería.