David Quiroa

Evangelio según San Mateo 23,1-12. 

Comentario por: David Quiroa

“A nadie en el mundo llamen ‘padre’” 

Este es uno de los argumentos favoritos de los hermanos separados para atacar  a la Iglesia.  Y muestra el error de leer y citar la Biblia por versículos y no tratar de entenderla.

Jesús habla en contra de los que presumen de lo que no son y nos pide ser humildes. Humildad es aceptar que todos nuestros dones vienen de Dios, que Él es nuestro Maestro,  nuestro Padre, nuestro Doctor, nuestro Juez, nuestro Sabio.  

Nosotros podemos usar sin pena nuestro título de maestro, doctor, abogado o sacerdote, siempre  y cuando lo usemos para servicio de los demás, dando buen ejemplo, y no para que nos digan “licenciado”, sólo por el gusto de humillar a los que no sacaron su cartón.

El ejemplo de hoy: San José de  Calasanz. Fundador de los Escolapios, maestros de las “escuelas-pías”, extendidos hoy por el mundo, enseñan a  los pobres con humildad.

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Evangelio según San Mateo 23,1-12. 

“Los escribas y fariseos ocupan la cátedra de Moisés; ustedes hagan y cumplan todo lo que ellos les digan, pero no se guíen por sus obras, porque no hacen lo que dicen. Atan pesadas cargas y las ponen sobre los hombros de los demás, mientras que ellos no quieren moverlas ni siquiera con el dedo. Todo lo hacen para que los vean: agrandan las filacterias y alargan los flecos de sus mantos; les gusta ocupar los primeros puestos en los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas, ser saludados en las plazas y oírse llamar ‘mi maestro’ por la gente. 

En cuanto a ustedes, no se hagan llamar ‘maestro’, porque no tienen más que un Maestro y todos ustedes son hermanos.  A nadie en el mundo llamen ‘padre’, porque no tienen sino uno, el Padre celestial. No se dejen llamar tampoco ‘doctores’, porque sólo tienen un Doctor, que es el Mesías.
Que el más grande de entre ustedes se haga servidor de los otros,  porque el que se ensalza será humillado, y el que se humilla será ensalzado”.